Invitación al recorrido de tres meses




Un recorrido de tres meses


Queridos amigos, os proponemos un ejercicio como si fuera un recorrido de tres meses para la exploración del cuerpo y de la mente, en un espíritu de amistad con nosotros mismos y con el apoyo de otros, que como nosotros, indagan este mismo camino.

El compromiso que os pedimos es mínimo: un minuto de meditación sentada y un minuto de ejercicio físico cada día. No se trata de seis horas de meditación sentada seguidas por un mes de olvido, sino más bien es esa gota que lentamente socava la roca. De este modo, nada de esfuerzos titánicos, será más bien el crear nuevas costumbres positivas gracias al placer de hacer las cosas que nos dan paz y alegría. Después, cada uno elegirá si ponerle un poco más de energía y de disciplina, según cada situación personal.

Este ejercicio tiene una duración de 13 semanas y se divide en dos partes principales:
  • En la primera, observaremos el cuerpo (una observación amorosa con un espíritu de amistad)
  • En la segunda, prestaremos atención a la relación entre el cuerpo y la mente.
En la última semana se concluye todo el trabajo. Cuatro de las trece semanas son “libres”, es decir, que no tienen un programa definido y se dejan a la creatividad personal. De todos modos, para estas semanas se sugieren algunos temas .

Thây, nuestro maestro, nos propone innumerables prácticas y, en estos tres meses, tendremos la posibilidad de profundizar una práctica diferente cada semana.

El tener un objeto de observación principal nos permite, una vez que salimos del olvido que acomete cada día, la posibilidad de saber adónde dirigir nuestra atención, nuestra cálida presencia.

También nos permite tomar refugio en la pequeña práctica diaria. Tomar refugio en lo pequeño es un poco el meollo de este trabajo: los pensamientos recurrentes, las preocupaciones, serán ellos mismos la campana de la consciencia que nos llevan hacia la libertad del momento presente.

Se van a proponer cada semana dos palabras clave, que pueden ser utilizadas como inspiración de la jornada. También se sugieren una práctica que podemos aplicar de un modo más libre y creativo, una breve lectura, que puede profundizarse a diario, para inspirarnos en el día. Además, se sugieren unas fuentes de información para una eventual ampliación a partir de las lecturas y charlas de Thây con su traducción respectiva.

Este ejercicio tiene un atractivo especial si se realiza en compañía, aunque sea la de otra persona más. Aunque nada excluye que lo hagamos solos y será un viaje hacia la amistad y la intimidad con nosotros mismos. Si tenemos la suerte de pertenecer a una Sangha, podemos proponerlo a nuestros amigos de la práctica, esto nos permitirá el compartir nuestra experiencia cada semana transcurrida e inspirarnos mutuamente para la semana venidera. Ha habido experiencias en las que solo un parte de la sangha participaba de forma completa y esto no ha afectado a la armonía general de la práctica. Todo lo contrario, los participantes a tiempo parcial han sido inspirados y contagiados a lo largo de este ejercicio.

Para participar en este hermoso viaje, recibir las prácticas y lecturas propuestas, compartir y apoyarse mutuamente es preciso formar parte de un grupo (lista de direcciones de correo electrónico) creado a tal efecto y en el que podemos inscribirnos escribiendo a la siguiente dirección de correo electrónico:


inforrecorrido@gmail.com


El recorrido comenzará pendiente de una nueva programación
Deseamos que este ejercicio os traiga alegría y miles de pequeños momentos de paz.


Un fuerte abrazo de parte de vuestros hermanos del Dharma.


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